26 Nov Por qué la inmersión lingüística es la clave
Exponer a los alumnos de manera intensiva a una segunda lengua es uno de los pilares fundamentales sobre los que se sustenta el programa educativo de St. Paul’s School junto con la atención a la diversidad, otra de sus señas de identidad.
En un mundo hiperconectado como el que vivimos, la adquisición de herramientas globales de comunicación es un aspecto esencial para las generaciones futuras. Y no hay forma más eficaz de adquirir dichas herramientas que a través de la inmersión lingüística educativa.
La inmersión va mucho más allá del bilingüismo, ya que se trata de vivir la inmensa mayoría de las horas lectivas en una lengua extranjera. Dentro de ellas, la lengua más universal es el inglés, idioma sobre el que construye su innovador programa educativo St. Paul’s School, una escuela situada en la Avenida Pearson de Barcelona, en un privilegiado enclave al pie del Parque Natural de Collserola, cuyo alumnado asimila las bases del aprendizaje intelectual combinando el inglés con el castellano y el catalán.
Inmersión lingüística desde Early Years (Educación Infantil)
En los 13.000 metros cuadrados de unas instalaciones que albergan cinco edificios educativos, St. Paul’s School desarrolla un proyecto único en la ciudad condal que combina los idiomas con la excelencia académica y el bienestar personal de sus alumnos, siempre con la inmersión lingüística como eje vertebrador y elemento clave en todas las etapas educativas. “En St. Paul’s los alumnos comienzan en la etapa de Early Years aprendiendo a través de la inmersión, la imitación de modelos nativos y la experimentación que conduce a la autoconfianza y autonomía”.
Los objetivos, lógicamente, cambian en función de la edad del alumnado y el curso. “Las clases de Nursery y Kinder (P3 y P4) se centran en conseguir un buen desarrollo oral, verbal y de comprensión de los conceptos más cercanos como la familia, el colegio, los estados de ánimo o las instrucciones básicas”, explica el profesorado de St. Paul’s School. En el curso siguiente, Prep (P5), “los niños pueden leer y escribir en las tres lenguas y, a partir de un proyecto manipulativo, comprender conceptos matemáticos también en lengua inglesa”, añade. Todo ello en un entorno de grupos reducidos que permite personalizar la enseñanza.
Hasta el final de la etapa educativa de Educación Primaria, la inmersión en inglés del alumnado de St. Paul’s es de un 80%, lo cual garantiza que los alumnos de la escuela dominen el idioma de Shakespeare tanto en su forma hablada como en la escrita y lo utilicen con naturalidad al final de los cinco primeros años al mismo tiempo que continúan desarrollando sus lenguas maternas.
La lengua francesa se introduce a los 10 años con las mismas premisas que la lengua inglesa: profesores nativos y grupos reducidos, estableciéndose como cuarta lengua con carácter obligatorio en secundaria. “Las distintas lenguas se plantean como llaves que abren opciones de futuro a nuestros alumnos. Para unos, el inglés será clave en su vida personal o profesional, otros necesitarán el castellano o el catalán y para algunos el francés será importante. Lo que garantiza St. Paul’s es que todos los alumnos tendrán las herramientas para decidir en libertad”, aseguran desde el centro educativo barcelonés.
Atención a la diversidad como parte del ADN.
La inmersión lingüística no es la única seña de identidad de St. Paul’s School, donde se trabaja de forma multidisciplinar, a través de centros de interés, y atendiendo en todo momento a la diversidad del aula. “La atención a la diversidad forma parte de nuestro ADN; es nuestra forma de entender la pedagogía”, recalca el equipo de St. Paul’s, que cree que “cada niño es único por lo que nos esforzamos en ser creativos y flexibles a fin de potenciar los diferentes tipos de aprendizaje”.
En St. Paul’s School nadie se queda atrás, pero ello no implica que aquellos que más destacan vean frenada su progresión. “Apoyamos a los alumnos que tienen dificultades, reforzándoles y ayudándoles a superar los niveles requeridos en cada curso y al mismo tiempo detectamos a los alumnos con altas capacidades y diversidad de talentos y les potenciamos con diversas estrategias educativas para que puedan desarrollarse plenamente”.
Patricia Carranza
Directora